Como sabemos el hecho de que Google o Apple lancen una nueva actualización de sus sistemas operativos móviles implica la posibilidad de que algunos modelos, normalmente declarados de forma injusta como obsoletos, queden fuera del listado de terminales que podrán recibirla de forma oficial.
Este hecho es un lastre especialmente grande en el sistema operativo de los de Mountain View, y algo que queda patente en las imágenes que acompañan la noticia. Os recuerdo que podéis pinchar en ellas para verlas en grande.
Sí, la fragmentación en Android sigue siendo muy grande, y además las actualizaciones llegan tarde o con defectos a muchos terminales. Una clara muestra de lo dicho lo tenemos por ejemplo en esta noticia.
¿Quién tiene la culpa? Principalmente los fabricantes, que son los responsables de que las actualizaciones lleguen a tiempo y en condiciones a los usuarios de sus terminales.
Es evidente que la fragmentación es menos visible en la gama Nexus, puesto que Google es quien la actualiza directamente, aunque todavía se aprecian retrasos en su lanzamiento para los diferentes dispositivos que forman dicha gama.
Terminamos con algunos datos que aportan claridad al asunto. Actualmente iOS 7 ostenta un 77% de cuota entre los usuarios de la plataforma móvil de Apple, mientras que Android 4.4 apenas llega al 1,1%.
Por su parte Android 4.3 se sitúa con un 4,2%, siendo Android 4.1 la única que se salva con un 29% de cuota. La venerable Android 2.3 sigue a la cabeza con un 36,5%.