Investigadores de la Universidad de Rice han descubierto que los nanotubos de grafeno blanco tienen un gran potencial como elemento de disipación en dispositivos móviles, tales como smartphones, por ejemplo.
Sí, se que más de uno habrá levantado una ceja al leer lo de grafeno blanco pero no os preocupéis tiene una explicación muy sencilla, ya que es un nombre que se utiliza en el mundillo para referirse al nitruro de boro aunque el mismo no tenga nada que ver realmente con el carbono.
Tal y como han expuesto los investigadores dicho material puede unirse para formar una plantilla limitada a un plano bidimensional capaz de ofrecer excelentes propiedades de disipación térmica.
El problema es que el calor no viaja igual de bien a través de una capa en 2D, un problema que los investigadores han conseguido superar gracias a la utilización de nanotubos de nitruro de boro o «grafeno blanco», consiguiendo crear una estructura en 3D que mantiene unas buenas propiedades térmicas.
Gracias a este descubrimiento podríamos experimentar un enorme salto en la potencia de dispositivos móviles, ya que sería posible introducir CPUs y GPUs de mayor rendimiento sin tener que preocuparnos por el calor generado, aunque obviamente su aplicación al mercado de consumo general es algo todavía muy lejano.
Más información: Neowin.