El Parlamento Europeo adoptó un proyecto de modificación del reglamento sobre la expedición de permisos de conducción. Esto significa grandes cambios para los conductores, aunque se ha eliminado la mayor controversia.
Próximamente, la normativa cambiará no sólo en lo que respecta a la expedición de permisos de conducir, sino también a quienes ya los han adquirido. Este es el resultado de nuevos cambios en el reglamento adoptado por el Parlamento Europeo. Sin embargo, la idea más controvertida discutida finalmente no se incluyó en el reglamento, informa Dziennik Gazeta Prawna.
La UE abandona el polémico cambio
Durante las negociaciones sobre el proyecto de cambios, el tema más controvertido fue la disposición según la cual los conductores mayores de 70 años debían someterse a controles médicos obligatorios. Se trataba de determinar si todavía podían conducir. Si el resultado era negativo, se les revocaría la licencia para que no supusieran riesgo en las carreteras. Además, los jubilados debían recibir el documento sólo por 5 años. Al final, estas disposiciones no se incluyeron en el proyecto adoptado.
Entonces, ¿qué cambiará? En primer lugar, el permiso de conducción, es decir, el documento en sí, debe tener una validez mínima de 15 años o 5 años en el caso de camiones y autobuses. Después de este tiempo, los conductores deben determinar su capacidad para continuar conduciendo. Es importante destacar que cada país puede definir sus propias normas más estrictas en esta materia, que requerirán, por ejemplo, exámenes médicos.
Muchas cosas cambiarán para los conductores principiantes. La UE quiere que estén sujetos a un mayor control durante dos años. Durante este tiempo, serán tratados de forma más estricta que los conductores experimentados, lo que significa, entre otras cosas, límites de alcohol en sangre más bajos y sanciones más altas por incumplimiento. Al mismo tiempo, los jóvenes de 18 años podrán obtener permisos de conducción para conducir camiones o autobuses con un máximo de 16 pasajeros. Se pretende que esto sea una solución al problema de la escasez de conductores profesionales.
Finalmente, el examen de conducir también cambiará. La UE quiere comprobar, entre otros, los conocimientos de los conductores sobre el uso seguro del teléfono, el uso de sistemas de asistencia, el fenómeno de los puntos ciegos y la conducción sobre superficies resbaladizas.