Hace tiempo que se sabe que el efectivo ya no es el medio de pago más popular. Utilizamos cada vez más tarjetas de pago, teléfonos e incluso relojes. No es de extrañar que la UE quiera aprovechar esta tendencia. Se creará un euro digital en el Viejo Continente. Existe un plan específico para esto.
euros digitales
En 2023 se sentaron las bases del euro digital. Entonces comenzó la fase preparatoria. Ahora el Banco Central Europeo ha admitido que fue un éxito. Se han encargado trabajos específicos sobre la moneda digital, que entrará en circulación en 2029.
Los puntos clave para mí son: el dinero es un bien público; los bancos centrales son los guardianes de este bien público; Y el dinero central emitido por los bancos centrales debe estar en forma digital, porque nos estamos moviendo hacia una era diferente en la que no todos necesariamente querrán tener billetes.
Sin embargo, la UE en realidad tiene un objetivo diferente, ligeramente oculto. En primer lugar, Europa quiere independizarse de los mayores proveedores de tarjetas de pago del mundo.. Hablamos de Visa y Mastercard, dos empresas americanas que dominan este mercado. El euro digital podría ser una alternativa para ellos, sobre la cual la UE tiene control total.
Lo prueban las palabras de Fabio Panetta, presidente del Banco de Italia. Admitió que sólo alrededor del 33 por ciento de los pagos digitales en la zona del euro están representados por bancos europeos. El 67 por ciento restante controla empresas de fuera del Viejo Continente.
Uno de los principales beneficios para los bancos de la zona del euro es que una vez construida la infraestructura del euro digital, podrán, utilizando esta infraestructura de estándar abierto, aprovechar esta red y competir a nivel europeo, generando así actividad económica adicional e ingresos adicionales, y esto también tendrá muchas implicaciones para la soberanía de la zona del euro en términos de control de la información que se transfiere con los pagos.
En última instancia, el programa piloto del euro digital se lanzará en 2027. Sin embargo, el uso público de la moneda está previsto que comience en 2029. Entonces todos deberíamos tener acceso a ella. Sin embargo, no se sabe qué significa esto para Polonia, después de todo, nuestro país todavía utiliza una moneda diferente y no parece que vaya a cambiar.
Se espera que la introducción del euro digital cueste 1.300 millones de euros. Posteriormente, se espera que los costes operativos anuales asciendan a aproximadamente 320 millones PLN.