Los científicos han logrado la hazaña de recrear Otro ladrillo en la pared, Parte 1 de Pink Floyd utilizando electrodos implantados quirúrgicamente en el cerebro de participantes epilépticos. Luego, una inteligencia artificial analizó los datos para recrear la canción.
No sólo los músicos saben cómo hacer sonar las notas. Por ejemplo, Google ha creado una IA capaz de crear música a partir de texto, pero que aún podría beneficiarse de mejoras. Aún más impresionante es este método de escanear el cerebro humano.
Mientras la NASA ya está convirtiendo el espacio en música, los científicos son capaces de transformar las señales eléctricas que pasan por nuestro cráneo. De hecho, la música tiene la capacidad de provocar una estimulación única de nuestro cerebro, que los investigadores se esfuerzan por comprender.
Otro ladrillo en la pared Parte 1 recreado con inteligencia artificial
Para un estudio publicado en PLOS Biology, los científicos lograron recrear Otro ladrillo en la pared, parte 1 por Pink Floyd gracias al análisis de la actividad cerebral. Esta técnica, conocida como reconstrucción de estímulos, permite recomponer una canción similar a una que una persona ya ha escuchado.
Detalle inusual, el estudio fue posible gracias al hecho de que los 29 participantes padecían epilepsia resistente a los medicamentos: . Los investigadores utilizaron estos electrodos para registrar la actividad de varias regiones del cerebro que procesan determinadas características de la música, como la letra o la armonía.
Luego los científicos utilizaron . Aunque el producto final es bastante apagado, la canción es casi discernible en comparación con el original: así que compruébalo por ti mismo. Los investigadores dicen que la calidad será mejor en futuros intentos.
La música activa partes específicas del cerebro.
El principal descubrimiento del estudio: un punto específico del cerebro se activaba cuando se tocaban las semicorcheas de la guitarra rítmica a 99 pulsaciones por minuto. Este descubrimiento podría proporcionar una mejor comprensión del papel que desempeña esta área en el procesamiento del ritmo.
Más concretamente, esto podría ayudar a dar voz a personas mudas debido a enfermedades como la esclerosis. En lugar de crear una respuesta monótona, casi robótica, una mejor comprensión de cómo el cerebro procesa la música podría ayudar