Los tardígrados han hecho recientemente una verdadera carrera, yendo mucho más allá del estrecho marco de la investigación científica. Estas criaturas microscópicas han vuelto a ganar fama, esta vez gracias a un vídeo en el que una criatura tan diminuta monta a un oponente mucho más grande que ella, convirtiéndolo en un rodeo real comparable incluso a montar un gusano en Dune, aunque en una escala muy pequeña.
Muchos consideran que los tardígrados son Uno de los bebés más lindos del mundo. A veces llamados osos de agua o lechones de musgo, en realidad son animales diminutos de ocho patas que también presentan habilidades de supervivencia muy altas. Se pueden encontrar en todo el planeta y las investigaciones han demostrado que ¡Pueden sobrevivir incluso en el vacío del espacio! También son criaturas valientes, como lo demuestra el último vídeo compartido en la plataforma de Instagram.
rodeo loco
Las imágenes presentadas como parte del concurso de vídeos Nikon Small World in Motion muestran a un individuo valiente que decidió librar un duelo exigente «montando» a su oponente natural – lombriz intestinal. Estas criaturas suelen comer tardígrados, pero eso no impidió que el pequeño implementara esta loca idea. Este hecho fue presenciado por Quinten Geldhof, un aficionado de 24 años que registró el momento.
Como señalan los expertos citados por sciencealert.com, Esto sucede a veces en los tardígrados, pero generalmente no hay equipo disponible para capturarlo. Lo que es aún más extraordinario es que este fotograma fue capturado por un entusiasta de la microescala que Hizo su grabación usando un microscopio y un iPhone. Geldhof tomó un poco de musgo de los alrededores de su casa y filtró los microorganismos que había en él. Finalmente, el portaobjetos contenía nematodos y algunos huevos de tardígrados, que eclosionaron al cabo de unos días. Fue uno de ellos quien decidió convertirse en vaquero, lo que proporcionó a Geldhof una grabación extraordinaria.
Hombre Para observar y registrar criaturas pequeñas utilizó un iPhone 14 Pro, que sujetó al ocular del microscopio mediante un adaptador. Se suponía que todo el equipo de observación le costaría sólo 1.000 dólares, o menos de 4.000 PLN, de los cuales el equipo de Apple probablemente fuera el que más le costara.