Un teléfono inteligente totalmente transparente por solo 25 dólares en pánico en las redes sociales. Entre el zumbido viral y la realidad desviada, regrese a una ilusión tecnológica que engañó a millones de usuarios de Internet.

¿Qué pasaría si realmente existiera un teléfono completamente transparente? Esta es la pregunta planteada por millones de usuarios de Internet después de que un video viral ha invadido a Tiktok. Vemos a una mujer joven en una tienda en San Francisco, manipulando lo que parece un teléfono inteligente del futuro: una losa totalmente transparente. No se necesitó más para desatar pasiones. Más de 50 millones de visitas después, el lienzo se pregunta: ¿es una innovación revolucionaria o una manipulación hábil?
En los comentarios, las especulaciones se llevan. Algunos se aseguran de que este sea un modelo ultra exclusivo, el «teléfono claro Nokia», cuyo precio alcanzaría los $ 35,000. Otros sueñan con un dispositivo que empujaría los límites de la tecnología actual.
Pero la realidad es mucho más simple: ningún fabricante ofrece, por el momento, un teléfono realmente transparente. Lo que vemos en este video no es un prototipo secreto ni un avance tecnológico … sino un engaño ingenioso.
Detrás de esta puesta en escena viral, encontramos un diseñador de contenido conocido como CATGPT. Especializando en temas relacionados con la tecnología y sus efectos en nuestra vida cotidiana, imaginó un objeto original: el metafono. No es un teléfono inteligente, sino una placa acrílica simple cortada para imitar los contornos de un teléfono. El objetivo? Ofrezca una alternativa a los adictos móviles, un objeto de sustitución que se supone que alivia la ansiedad de no tener su dispositivo en sí mismo.
Según CATGPT, este teléfono falso reduciría la dependencia digital al retener la ilusión de un teléfono en su bolsillo o mano. Una especie de muleta mental para aquellos que les resulta difícil separarse de sus pantallas. La idea es parte de una reflexión más amplia sobre las adicciones digitales y los medios para luchar contra ellas, incluso si la solución propuesta puede parecer confusa.
Comercializado con 25 dólares, el metafono rápidamente se encontró agotado, prueba de que el objeto pudo encontrar su audiencia, entre la curiosidad y el segundo grado. Si algunos lloran estafa, otros dan la bienvenida a la creatividad del concepto, que cuestiona nuestra relación compulsiva con las nuevas tecnologías.
Por lo tanto, no es un teléfono inteligente revolucionario real, sino un espejo tenso en nuestra sociedad hiperconectada. Detrás del zumbido, una pregunta persiste: ¿Estamos listos para vivir sin nuestros teléfonos, o necesitamos, básicamente, un simulacro para apaciguar nuestra falta?
Fuente: Lemon Press