Battlefield 6 promete ser uno de los mejores juegos multijugador de este año. Los jugadores ya estaban encantados con él durante las pruebas beta, por lo que no es de extrañar que los servidores hayan estado abarrotados desde el primer día. No hay ninguna sorpresa aquí. Finalmente sentí la magia que sentí hace una docena de años, primero jugando a Battlefield 3 y luego también a Battlefield 4. Veamos qué tiene para ofrecer la producción de EA desde un punto de vista técnico.
Battlefield 6 desde una perspectiva técnica
Electronic Arts cooperó con NVIDIA para ofrecer a los jugadores la mejor calidad posible desde el principio. La optimización del juego ha sido muy buena desde el principio, como se puede comprobar en los requisitos de hardware.
Para jugar en resolución 1080p a 30 fotogramas por segundo con pocos detalles, basta con la tarjeta gráfica GeForce RTX 2060, que debutó en el mercado hace más de 6 años, por lo que se puede calificar de antigua. Si esperas 60 fotogramas o más, el modelo GeForce RTX 3060 Ti será suficiente. Es un poco más nuevo, pero sigue siendo de gama media y tiene dos generaciones. Sin embargo, para jugar en configuraciones ultra, a 4K y a más de 144 fps, necesitarás una de las tarjetas más potentes del mercado, es decir, la GeForce RTX 5080. Aquí es donde comprobaremos cómo funciona Battlefield 6 en varias configuraciones.
Y tenemos bastantes posibilidades. Aunque no hay soporte para Ray Tracing en Battlefield 6, es completamente comprensible. Sin embargo, en este tipo de juegos la prioridad debe ser el máximo rendimiento. El trazado de rayos, aunque proporciona excelentes efectos visuales, reduce significativamente la velocidad de fotogramas.
Afortunadamente, Electronic Arts decidió introducir soporte para otras soluciones de NVIDIA. Esto incluye anti-aliasing DLAA (Deep Learning Anti-Aliasing), la técnica de escalado de imágenes DLSS 4 (Deep Learning Super Sampling) con la opción Multi Frame Generation, que le permite generar hasta 3 fotogramas adicionales y, por supuesto, NVIDIA Reflex, que reduce significativamente los retrasos, brindándole una ventaja real en el campo de batalla virtual.
Plataforma de prueba
Para las pruebas utilicé una computadora con las siguientes especificaciones técnicas:
- Tarjeta gráfica: NVIDIA GeForce RTX 5080 Edición Fundadores
- Procesador: Intel Core i7-13700KF
- RAM: 32GB DDR5 5600MHz
- Placa base: ASRock Z790 PG Lightning
- Fuente de alimentación: SMK Okame M2 850 W 80 Plus Oro
- Unidad: Kingston M.2 PCIe Gen4 NVMe KC3000 1 TB
Realicé las pruebas en las dos resoluciones más populares y más interesantes para los jugadores, es decir, 1920 × 1080 y 2560 × 1440 píxeles. Renuncié a 4K Ultra HD (3840 × 2160) porque, seamos realistas, probablemente ningún loco elegirá esa configuración en Battlefield 6, donde la suavidad es muy importante. Centrémonos en lo que realmente interesa al 99,9 por ciento de los jugadores.
Pruebas de rendimiento
Realicé las pruebas en las dos resoluciones mencionadas, con excelentes configuraciones de calidad de gráficos, pero en cuatro escenarios diferentes:
- Con anti-aliasing DLAA habilitado
- Con el suavizado TAA habilitado
- Con DLSS (calidad) habilitado
- Con generación de fotogramas habilitada adicionalmente (x4)
Los resultados son los siguientes:
Como puedes ver, la GeForce RTX 5080 maneja Battlefield 6 a la perfección. Con la configuración de gráficos más alta posible y con DLAA habilitado, no hay problemas para obtener más de 120 fotogramas por segundo con una resolución de 1440p. A su vez, en el todavía más popular 1080p podemos contar incluso con unos 200 fps. Este es un gran resultado, que se puede mejorar significativamente con DLSS. A su vez, la generación de fotogramas tiene una eficiencia cósmica de 500 a 600 fotogramas por segundo.
Lo más importante es que la jugabilidad en Battlefield 6 con la tarjeta gráfica GeForce RTX 5080 es extremadamente satisfactoria. La imagen es muy nítida y muy suave. Los gráficos lucen geniales y al mismo tiempo podemos contar con un rendimiento adecuado, lo que facilita aún más la eliminación de oponentes. Me dan ganas de jugar.
¿Cómo se ve?
Por cierto, echemos un vistazo a cómo se ve el juego en la configuración de gráficos más alta. Hay que admitir que el apartado visual es de muy alto nivel, lo que tiene un impacto muy positivo en la inmersión, es decir, en el nivel de entrada en el juego. Después de un tiempo, nos olvidamos de todo lo que sucede a nuestro alrededor y nos dedicamos por completo a las batallas virtuales. Edificios que caen, flechas volando y explosiones constantes nos hacen sentir como si estuviéramos dentro de una batalla real. Este es el campo de batalla que he estado esperando durante mucho tiempo.
A continuación puedes ver cómo se ve el juego en la configuración más alta en una resolución de 1440p:
Por cierto, intenté comparar la calidad de la imagen con DLSS activado. Curiosamente, aunque Deep Learning Super Sampling hace que la imagen sea aún más suave, incluso puede mejorar la calidad. En la primera de las capturas de pantalla siguientes, preste atención principalmente al alcance. En la configuración estándar, en algunos lugares aparece ligeramente borroso. Después de habilitar DLSS, la imagen es mucho más nítida (aquí en resolución de 1080p).
A su vez, en resolución 1440p el efecto no es tan notorio, pero conviene recordar que DLSS aporta una suavidad de imagen mucho mayor. Entonces, si no puedes ver la diferencia, es mejor elegir más fotogramas por segundo.
Esto demuestra que tanto EA como NVIDIA hicieron un gran trabajo. Battlefield 6 es fantástico para jugar y la producción no sólo está bien optimizada, sino que también ofrece numerosas soluciones que pueden mejorar la calidad de la imagen y la fluidez del juego. No queda más que empezar a jugar y disfrutar de lo que la producción tiene para ofrecer.
Texto patrocinado encargado por NVIDIA.